La magia está en aprender
¿Qué diríais si un sábado por la noche os llega un mensaje -cariñoso por demás- proponiéndoos un plan de cena en una gastro-taberna con una jornada panarra-experimental añadida? ¿Y qué diríais si la invitación la hacen Pablo Conesa y Rebeca Ruiz para disfrutar de la compañía de Beatriz Echevarría?
Pues lo que yo dije... ¡ya voy!
La verdad es que me perdí la cena de gastrobar porque andaba yo en otros placeres gastronómicos con la familia. Pero a las 7 de la mañana estaba yo el domingo clavada en la puerta de mi casa esperando al resto de la troupe. Fue un día corto y largo a la vez... horas que volaron, pero casi 12 horas juntos los cuatro.