domingo, 23 de enero de 2011

Proyecto Pankenstein

¿Alguna vez has hecho un Pankenstein?

Son esas recetas infalibles, de toda la vida... que un día producen algo extraño, equívoco y muy a menudo frustrante.

Otras veces son recetas nuevas que comienzas a hacer con desconfianza y terminas con ... pasmo ante el resultado ¿Pero alguien ha conseguido un buen resultado con esa receta alguna vez?

En fin, lo mejor de todo es tomárselo con humor. Recuerdo una película que ví con mis hijas, en la que toda la familia aplaudía y felicitaba cordialmente a su hijo inventor cuando ... bueno, cuando los inventos tenían más de fracaso que de otra cosa. ¿Y sabeis por qué? Porque decían que la manera rápida de aprender es equivocarse. Al menos te da la oportunidad de intentarlo otra vez, otra manera, otra posibilidad.

De vez en cuando todos tenemos un pequeño "Pankenstein" en la familia. Esta es la foto del último de los míos (que no el primero, ojo).


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De vez en cuando, y con esta etiqueta de "Proyecto Pankenstein", iré subiendo mis mejores fracasos. Ah, por cierto, el copyright del título es de "Prime". Entre bromas analizábamos esta mañana a  nuestro pequeño engendro y le salió naturalmente el nombre (si es que este hombre es de lo mejor, lo mejor).

Y ahora la parte técnica: un breve análisis de por qué pienso que algo se quedó en el camino. Este, que iba a ser un pan de provecho, un buen pan de familia, no ha llegado a casi nada: bueno, se ha quedado en foto y entrada de blog, que tampoco es poca cosa en los tiempos que corren.

Ella era una masa normal y corriente: su poquito de masa madre (tirando a ácida, que llevaba 10 días dejada de la mano de la autora), su poquito de levadura fresca para ayudar a la pariente avinagrada, su poquito de centeno integral, su mucho de espelta integral (¡por dios, con lo cara que está la espelta!), y su tercio de harina blanca. Era ya de entrada un pan que aspiraba a contundente y recio (muy, pero que muy integral).  Y eso lo logró: recio está. Pero además MUY ÁCIDO. Así, en mayúsculas, porque el regusto que deja después de tragarlo.... Y es que nosotros lo probamos todo. Incluso puede que lo comamos entero (eso de que la comida no se tira está grabado a fuego en mi mente, aunque empiezo a considerar que este pan cae fuera de la categoría de "comida"). No puede negar su ascendencia: es todo un "pankenstein".

Aspiraba a ser un pan de importancia como sus hermanos mayores, por ejemplo este, nuestro querido pan estrella.

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O este otro, nuestro querido pan bollo:


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Pero se ha quedado en Pankenstein: duro, ácido, plano. Es fotogénico: yo que lo conozco en persona os puedo asegurar, que no es tan bonito como pueda parecer.

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Y es que lo amasé al atardecer. Mi plan era darle forma, encestarlo y meterlo en la nevera antes de irme a dormir. Pero la realidad fue que se quedó sin formar, sin encestar y sin nevera. Esta mañana y tras 18 horas de fermentación en mi cocina cálida, me encontré algo así como un barro lleno de pequeños hormigueros, desinflado y con un fuerte olor ácido. Aún así, y por aquello de que la curiosidad mató al gato y no a la mujer, lo formé, encesté y llegada su hora lo hornée. Para disimular los posibles defectos de la falta de estructura -que se veia venir, vaya si se veía venir- lo espolvorée de sésamo.

El sésamo esconde en el primer bocado la acidez, pero el fondo de boca final es .... TREMENDO. Ha sido toda una experiencia. Me ha enseñado mucho sobre la vida de un fermento, de la harina y de una masa. Me ha enseñado mucho sobre mi propio gusto y hasta donde llega la tolerancia a la acidez.

En fin, me ha permitido compartir con vosotros el Pankenstein del día de hoy.

4 comentarios:

  1. Querida Circe: Gracias por compartir también los errores. No está mal aprender del error ajeno. Yo apenas estoy empezando con la masa madre que me merece mucho respeto; así que seguramente habrá más de un "pankestein" en mi cocina. Por cierto, me ha encantado como han bautizado a la "criatura". Ese Prime debe tener mucho sentido del humor...

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  2. Si no fuera por su gran sentido del humor... esta casa no sería lo que es. Y lo digo con el corazòn en la mano!!!!

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  3. ai Circe...si yo tambien tendria que poner mis ..como los llamo yo "experimentos",, pero de todo se aprende¡¡ un saludo desde Barcelona

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  4. jajajajaja , mirando el recetario , digo qué c ño será esto.....? genial
    besines

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