Propuesta dulce CWK Noviembre 2010: Manzanas y dátiles sonrientes

¡Este es el pastel bajo en calorías del que no te cansarás nunca!

Este pastel invertido (Upside-Down Cake) parte de una receta tradiconal de un pastel invertido de piña. La receta la encontrareis en el Baker's Companion, editado por King Arthur Flour. Después y tras algunas sustituciones (la fruta) y añadidos (las especias) ha dado este resultado.




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 En este caso, decidí huir de la piña en lata y buscar una combinación de frutas de otoño: reivindiquemos comer la fruta de temporada que se produce cerca de nuestra casa. Así apoyaremos a los productores locales en esta difícil crisis a la vez que comeremos fruta que ha estado menos tiempo en cámaras y ha madurado más tiempo en el árbol.

Yo he escogido manzanas y dátiles. Aunque no se aprecie bien en la foto, el pastel lleva el dibujo de una cara sonriente. En casa, mis hijas dicen que tengo debilidad por las caras sonrientes en los pasteles, pero es que ¡un pastel siempre hace sonreir!

Como el caramelo del fondo lo hice con azúcar moreno, la tarta quedó muy oscura. Por ello recomiendo hacerlo con azúcar blanca.

Ingredientes

50 gramos de mantequilla

75 gramos de azúcar blanca o morena

una o dos manzanas

media docena de dátiles deshuesados

nueces o almendras (opcionales)

Una combinación de especias

(que puede incluir nuez moscada, canela, jengibre, pimienta de jamaica, clavo)

125 gramos de harina blanca

media cucharadita de levadura en polvo

media cucharadita de sal

un cuarto de cucharadita de bicarbonto sódico

2 huevos grandes

125 gramos de azúcar

75 ml. de zumo de manzana

una cucharada y media de esencia de vainilla

Método de elaboración

Derretir el azúcar (la primera cantidad de la receta) con la mantequilla y verter la mezcla en un molde redondo de 26 centímetros. Forrar el fondo del molde haciendo un dibujo decorativo con las manzanas peladas y partidas finamente y con lo dátiles (partidos por la mitad). Si se quiere utlizar nueves o almendras también en la decoración. Se espolvorea con las especias que se hayan elegido.

Calentar el horno a 180º.

Tamizar la harina, sal, levadura y bicarbonato juntos. En un cuenco batir el azúcar (última cantidad de la receta) con los huevos hasta que estén blancos y muy esponjosos. Añadir poco a poco el zumo de manzana y la esencia de vainilla. Añadir la mezcla de harina y sal y batir un minuto.

Verter la masa en el molde decorado con la fruta e introducir en el horno. Cocer durante 40 minutos. Esperar cinco minutos e invertir sobre un fuente. Con una paleta de goma verter todo el caramelo sobre el dulce.

Puede servirse templado o frio.



Trucos y consejos

• Puede utilizarse cualquier tipo de fruta fresca para la decoración. Si es una fruta que suelta mucho jugo al cocer, se puede espolvorear con un poco de maizena.
• Al pelar la manzana y partirla, conviene "regarla" con algo de zumo de limón para que no se oxide. La avcidez del limón será un buen contrapunto para el caramelo del fondo del molde.
• La manzana adquiere un sabor más intenso si la espolvoreamos con canela, jengibre, nuez moscada, clavo y/o pimienta de jamaica. Todas esas especias o cualquier combinación de ellas hacen de las tartas y pasteles de manzana un dulce sublime.
• El bizcocho de esta receta es esponjoso. Tan sólo tiene la grasa de las yemas de los huevos, por lo que es muy bajo en calorías. Es una base perfecta para otros postres y tartas.

Aproximadamente 240 cal./100 gramos

Hecho con 250 gr. de manzanas y 50 gramos de dátiles